En un episodio titulado Estranger Things, los guionistas se atrevieron a cruzar una línea impensada: la muerte de Marge Simpson, la matriarca de la familia más famosa de Springfield, en un desenlace que combina humor, nostalgia y un profundo impacto emocional. El verdadero golpe llega en un salto al futuro, 35 años después, donde los espectadores descubren que Marge ya no está. La serie, conocida por su humor irreverente, se sumerge en una narrativa conmovedora que muestra a Bart y Lisa como adultos enfrentando la ausencia de su madre. Las causas de su fallecimiento no se detallan, pero su impacto se siente en cada escena.

